
Francia Aude Hauterive Gérard Bertrand Cigalus 2021 0.75 L.
Ficha Técnica
Sobre Francia Aude Hauterive Gérard Bertrand Cigalus 2021 0.75 L.
Gérard Bertrand Cigalus es un vino blanco emblemático del sur de Francia elaborado por SPH Gérard Bertrand en la zona de Aude Hauterive, en Languedoc. Destaca por su perfil maduro y complejo, que refleja el estilo mediterráneo del productor, con una interpretación moderna y cuidada de las variedades blancas de la región.
Color:
Amarillo dorado brillante con reflejos pajizos, de intensidad media-alta, que revela una buena concentración. Su aspecto limpio y luminoso es característico de los blancos de clima cálido del Languedoc, donde la madurez de la uva se expresa con matices dorados bien definidos.
Nariz:
Aromas complejos de fruta de hueso madura, notas cítricas finas y apuntes de frutas exóticas, acompañados por recuerdos de flores blancas y ligeros matices especiados. Se percibe un trasfondo cremoso y de sutil madera, muy en línea con el estilo gastronómico y pulido que caracteriza a los vinos de Gérard Bertrand en esta zona.
Boca:
Entrada amplia y envolvente, con textura untuosa y una acidez equilibrada que aporta frescura al conjunto. El paso de boca es largo, con sabores de fruta madura, ligeros toques tostados y una sensación final persistente y elegante, fiel al enfoque de SPH Gérard Bertrand de elaborar blancos estructurados y con vocación de mesa gastronómica.
Notas de cata
La bodega
SPH Gerard Bertrand
SPH Gérard Bertrand es una bodega francesa arraigada en el Languedoc, principalmente en denominaciones como Corbières, Minervois, La Clape o Limoux. Trabaja una amplia gama de variedades mediterráneas y atlánticas, entre ellas Grenache, Syrah, Mourvèdre, Carignan, Cinsault, así como Chardonnay y Viognier para sus blancos, adaptadas a la diversidad de suelos calcáreos, arcillosos y de cantos rodados que caracterizan la región.<br><br>Firme defensora de la viticultura biodinámica, la bodega prioriza rendimientos moderados, vendimia manual y vinificaciones por parcela, buscando expresar con precisión el carácter de cada terroir. Emplea fermentaciones controladas, crianzas en barrica francesa y, en algunos vinos, ánforas, para lograr tintos estructurados, rosados de gran finura y blancos frescos, todos marcados por la influencia del clima mediterráneo y los vientos marinos.




